Perseverancia en el Bien, el remedio para la vida

Mensaje extraído de la 11ª edición de la revista ¡JESÚS ESTÁ LLEGANDO!, en la sección Cartas, correos y opiniones.

De la redacción
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Arquivo pessoal
Anthony Correa, 11 años.
Montevideo, Uruguay.

Durante un estudio fraterno en la Religión de Dios, del Cristo y del Espíritu Santo en Montevideo, Uruguay, fue abordado el pasaje bíblico “Jesús sana al siervo de un centurión” (Evangelio del Celeste Amigo, según San Mateo, 8:5 al 13; y San Lucas, 7:1 al 10). El tema fue tan productivo que el joven Anthony Correa, de 11 años, decidió enviar sus comentarios a la redacción de la revista ¡JESÚS ESTÁ LLEGANDO!:

En el pasaje “Jesús sana al siervo de un centurión” podemos ver que todos nosotros debemos tener Fe que Realiza en Jesús, porque Él es capaz de curar a los enfermos y ayudarnos siempre.

El centurión pidió la ayuda del Cristo porque sabía que Él podía curar a su siervo que se estaba muriendo.

Él también demostró que amaba a sus empleados, era bondadoso, se preocupaba por aquel que tenía menos y, así, era querido por todas las personas.

El amor, que también es preocuparse por el prójimo, hizo que Jesús amparara al siervo del centurión. El Maestro vio que, a pesar de las riquezas materiales, él era muy humilde.

Si le damos importancia a los demás, haciendo el bien y pidiendo con fe, todo mejora.

 

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